En declaraciones a la prensa después de un intercambio de criterios con el comisario europeo Thierry Breton, el titular insistió en las expectativas de París de que Bruselas establezca requisitos alcanzables.
Air France, asociada con la compañía neerlandesa KLM, recibió el año pasado un rescate de siete mil millones de euros del Estado galo, su principal accionista con un 14 por ciento, en medio del devastador impacto económico de la Covid-19 en el sector aeronáutico.
Sin embargo, la continuidad de la crisis sanitaria conduce a la aerolínea a esperar una nueva ayuda, lo cual Le Maire consideró ‘perfectamente comprensible’.
Las reglas de la competencia limpia de la Unión Europea demandan la discusión del nuevo rescate, mientras el gobierno francés por su parte exige a Air France el respeto a las políticas medioambientales y la sostenibilidad económica.
La aerolínea y el gobierno recibieron duras críticas el año pasado desde sindicatos y fuerzas progresistas de la sociedad, después de que la cúpula de la empresa decidiera eliminar miles de puestos de trabajo, pese a recibir el multimillonario apoyo.
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