Silenciado por la montaña, Philipsen tratará de ratificar que no hay nadie más rápido en el trayecto de 184,9 kilómetros entre Moûtiers y Bourg-en-Bresse, un recorrido plano que incluye par de escaladas de cuarta categoría, las cuales no impedirán a los velocistas sacar provecho de la jornada.
El belga ya ganó en las etapas tres, cuatro y 11, y lidera con holgura la carrera por puntos (camiseta verde) con 323, 137 más que el segundo en la clasificación, el danés Mads Pedersen (Lidl-Trek).
En la batalla por el maillot amarillo de monarca de la edición 110 de la Grande Boucle todo parece decidido después de la contrarreloj y de la despedida de los Alpes ayer, con Vingegaard a las puertas de retener el título logrado el año pasado.
Con apenas cuatro etapas por delante, tres de ellas bastante tranquilas, el danés saca en la general individual siete minutos y 35 segundos a su gran rival, el esloveno Tadej Pogacar (UAE Team Emirates), campeón en 2020 y 2021, una diferencia imposible de recuperar, a menos que ocurra un contratiempo mayor.
Por equipos, Jubo-Visma domina con bastante ventaja, más de 15 minutos sobre UAE Team Emirates y casi 21 sobre Ineos Grenadiers.
En cuanto a los latinoamericanos, ha sido un Tour de Francia discreto, con el colombiano Harold Tejada (Astana) como el mejor ubicado, en el puesto 34, mientras el monarca de 2019, el también cafetero Egan Bernal (Ineos), se sitúa en el 36.
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