El gesto de las flores frescas se hizo extensivo al Héroe Nacional José Martí, al iniciador de las gestas independentistas Carlos Manuel de Céspedes y a la Madre de la Patria, Mariana Grajales, todos alineados en la franja frontal de la necrópolis, donde una llama eterna aviva la recordación.
El dirigente de la Revolución Bolivariana arribó en la tarde a esta ciudad, donde conocerá también el antiguo Cuartel Moncada, asaltado por Fidel al frente de un puñado de jóvenes revolucionarios para comenzar la última y definitiva etapa en las luchas insurreccionales de los cubanos.
Las palabras de Cabello agradecieron la oportunidad de visitar este sitio sagrado, evocaron un encuentro con el líder histórico de la Revolución Cubana y reafirmaron la amistad entre ambas naciones y sus procesos transformadores que han enfrentado con éxito al imperialismo en las últimas décadas.
Otro punto de la agenda del dirigente venezolano fue el Museo enclavado en la otrora fortaleza militar, donde apreció los avances en el nuevo montaje que conjuga avanzadas tecnologías con las vertientes tradicionales para mostrar uno de los hechos más trascendentes en la historia nacional.
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