El récord fue perceptible en un municipio de Anatolia occidental, y superó en casi medio grado a la plusmarca anterior.
Esta cifra se inscribe en el listado oficial del instituto meteorológico turco, mientras Özhaseki achacó el hecho a la ola de calor que azota el país.
Debido a ese fenómeno se produjeron además numerosos incendios en el sur y oeste de Anatolia, aunque de menor dimensión que los registrados en veranos anteriores, cuando las llamas destruyeron enormes extensiones de bosques y cultivos.
ro/ehl
