Esa situación responde a cancelaciones y retrasos derivados de un problema técnico del sistema de control del tráfico aéreo (CTA) del país.
Llevará algunos días devolver a las personas a los destinos donde deberían estar, declaró el funcionario a medios nacionales.
Según datos de una compañía de análisis sobre aviación más de mil 500 vuelos resultaron cancelados la víspera después de que el sistema CTA requiriese usar la versión manual de seguridad.
Esa cifra equivale a más de una cuarta parte de todos los viajes con salida o destino al Reino Unido.
Tendremos que revisar de forma independiente por qué ocurrió un problema de esta magnitud, señaló Harper, quien descartó un ciberataque.
Algunas aerolíneas alertaron a los pasajeros de “retrasos inevitables” mientras ajustan sus horarios.
Los aeropuertos de todo el país aconsejaron confirmar el estado de sus vuelos directamente con las aerolíneas antes de desplazarse a la terminal.
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