La encuesta, publicada por la prensa aquí, es producto de un exhaustivo informe de la Universidad de esta capital.
Según explicó en una entrevista el profesor Robert Staniszewski, que dirigió el sondeo, estos datos muestran “cuán polarizada es la situación de los refugiados” en Polonia.
Cabe destacar que esta nación es miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y punta de lanza de la arremetida occidental contra Rusia tras el despliegue militar en el Donbass en febrero de 2022.
Además el gobierno se brindó a acoger a los desplazados y brindarles condiciones dignas de vida.
Según el estudio aproximadamente el 75 por ciento de los refugiados son mujeres, en su mayoría menores de 40 años, y el resto son casi íntegramente ancianos o menores de 18 años.
El mercado laboral polaco discrimina a los migrantes por su nacionalidad, según el 75 de los encuestados, mientras la quinta parte se queja de recibir peor salario que los polacos y de afrontar mayores complicaciones para acceder a puestos en la administración pública.
Por último solo el 10 por ciento está seguro de querer continuar su vida aquí tras finalizar el conflicto, frente al 40 por ciento que manifiestó su deseo de retornar a Ucrania.
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