La víctima fue objeto de extorsión por parte de su victimario a quien conoció por las redes sociales, según las investigaciones.
La sentencia subrayó la especial gravedad de los hechos que conmocionaron al país en julio del pasado año.
Un perito que declaró en el juicio señaló que el condenado no mostrado signos de remordimientos y presenta posiblemente trastornos de la personalidad.
También advirtió sobre la alta probabilidad de que pudiera cometer otros delitos semejantes.
ro/ehl