Instituto Cervantes de París
Autor: Antonio Cuesta
Prensa Latina
En una sala completamente abarrotada, el autor conversó con el público explicando detalles sobre su trabajo como escritor, la forma en que desarrolla sus libros y su sentimiento de pertenencia a su barrio, Mantilla, a su ciudad, La Habana, y a su país, Cuba.
“Mucha gente me pregunta por qué sigo viviendo en La Habana, por qué sigo viviendo en Cuba, y tengo que decir que a pesar de las dificultades, Cuba me ofrece cosas que no puedo encontrar en ningún lugar del mundo”, afirmó.
Tras relatar la anécdota de que en su barrio “aún me conocen como el hijo de Alicia, mi mamá, que con 95 años aún entra y sale de la casa y se relaciona con todos los vecinos”, consideró que forma parte de una cultura a la que no quiere renunciar, “soy y seguiré siendo un escritor cubano, y no querría dejar de serlo”, dijo.
Sobre su último libro “Personas decentes” señaló que La Habana se describe como una apropiación personal, convirtiendo la ciudad en uno de los protagonistas principales de la novela, al igual que su conocido detective Mario Conde, y arropándola con otros elementos consustanciales como son la música y el beisbol, deporte nacional en Cuba.
Padura explicó que su próximo libro estará dedicado a La Habana, desarrollando a través de la literatura una forma específica que describa su ciudad, y añadió que entre las muchas formas en que forjamos nuestra personalidad, “en mi caso una parte importante tiene que ver con la ciudad en la que vivo, y que me anima a ser escritor”, aseguró.
El escritor cubano se sintió satisfecho de “poder escribir con libertad, diciendo las cosas que pienso”, y de describir a través de la mirada de Mario Conde la realidad cubana tal y como la ve el personaje, con el cual el autor comparte generación y una cierta visión del mundo.
mem/acm