Los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular, encabezados por su vicepresidenta, Ana María Mari, acudieron a depositar una ofrenda floral ante el túmulo donde estuvieron los restos mortales del general Raúl Díaz Argüelles, quien fuera el primer jefe de la misión militar cubana en este país.
Al cementerio del Alto de las Cruces los parlamentarios fueron acompañados por varios de los integrantes de la cooperación de la isla y de la misión diplomática en Luanda, entre ellos el embajador, Oscar León, y el vicepresidente para Angola de la corporación Antex, Pedro Jaime Bonilla.
En el acto rememoraron al combatiente cubano, quien murió el 11 de diciembre de 1975, cuando el transportador blindado en el que se trasladaba hizo contacto con una mina antitanque.
Con este tributo recordaron a los dos mil 85 combatientes de la nación caribeña que ofrendaron sus vidas junto al pueblo angoleño, además de otros 204 que murieron mientras realizaban tareas civiles.
La vicepresidenta de Antex para el trabajo político, Ana Margarita Ibáñez, destacó la trayectoria de Argüelles, quien se incorporó al Directorio Revolucionario “13 de Marzo” en la lucha contra la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1959) y alcanzó el grado de comandante con solo 22 años.
Recordó las palabras del líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, en el discurso pronunciado en 1989 en honor a los caídos en las tierras africanas, cuando expresó que “hay ejemplos revolucionarios que los mejores hombres y mujeres de las futuras generaciones, dentro y fuera de nuestra patria, no podrán olvidar”.
Ibáñez apuntó que Raúl Díaz Argüelles es un símbolo de cubano digno, de los que son capaces de dar su vida por el bienestar e independencia de los pueblos hermanos del mundo.
Aseguró que los cubanos que ahora defienden la paz en Angola, desde la medicina, la educación y otras esferas de la colaboración, sabrán ser herederos de su ejemplo.
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