Por la isla caribeña también sobresalió en el evento celebrado del 25 al 28 de octubre David Villafaña, dueño del máximo reconocimiento en el concurso de habilidades, cuya triunfadora entre las mujeres fue la canadiense Josee Blondin.
Herrera y Villafaña fueron los únicos capaces de quebrar el dominio de los representantes de Canadá, merecedores de los lauros en los otros apartados del certamen, que reunió también a golfistas de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, España y Vietnam.
Sophie Caron fue la gran acumuladora de unidades y ocupó, además, el primer lugar de las damas, escoltada por Marie France Richard (subtitular) y Noelline Poirier (tercera).
Eduard George y Sylvain Lapointe dominaron la primera y la segunda categoría de caballeros, respectivamente, y en uno y otro caso siguieron de manera descendente Peter Whitehead y Rene Laporte, y Andre Sevigny y Michel Rivard.
Tras la ceremonia de premiación, efectuada anoche en la mansión Xanadú, la cual encabezó Juan Carlos García, ministro cubano de Turismo, Herrera expresó a Prensa Latina su satisfacción y alegría por el triunfo que «llegó con buena suerte».
Contó que estuvo una década sin jugar y este regreso no pudo ser mejor, resaltó, con una victoria en un torneo de gran calidad y de varios jugadores habituales.
Por otra parte, el cubano de 58 años de edad alabó la organización en el Varadero Golf Club, escenario de la competencia muy próximo a la playa azul, y la excelente comunicación y camaradería entre los participantes.
Estoy muy contenta, me siento bien en Cuba, como si estuviera en casa, su gente es maravillosa, manifestó Caron, cuyos éxitos los calificó como oportunos regalos de cumpleaños.
Dicho campo cuenta con 18 hoyos, más de seis mil metros cuadrados de extensión y las infraestructuras requeridas para un torneo que se consolida y pretende seguir siendo un especial momento para disfrutar entre amigos, al decir del director general de la sede, José Tobar.
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