Orgullo del municipio de Jovellanos, en la occidental provincia cubana de Matanzas, y miembro de una ilustre familia beisbolera que dejó huellas en los campeonatos domésticos, Fernando participó en 23 Series Nacionales e integró durante 12 años la selección nacional de Cuba en eventos internacionales.
De carácter afable, respetuoso y con un aire de persona inofensiva, se transformaba en el cajón de bateo en un torbellino que castigaba a los serpentineros rivales con una naturalidad tremenda.
En su carrera conectó 2215 hits, 280 de ellos cuadrangulares, empujó mil 223 carreras, recorrió 3523 bases y promedió al bate para 307, números que reflejan el poderío ofensivo que desplegó sobre la grama en una época plagada de temibles lanzadores.
Fue dos veces campeón con su equipo Henequeneros y obtuvo múltiples medallas doradas con la selección nacional, donde ocupó varias veces el tercer turno en la alineación.
Sánchez forma parte del selecto grupo de cinco jugadores que en Series Nacionales han promediado sobre 300, robado más de 100 almohadillas, sobrepasado las 2 mil carreras producidas y se han embasado en más de 3 mil oportunidades. Los otros son Omar Linares, Lázaro Vargas, Rolando Meriño y Yordanis Samón.
«Agradezco mucho el cariño de este pueblo que siempre me tiene presente a pesar de estar retirado hace casi tres décadas», declaró a Prensa Latina el hombre que conectó un vuelacercas en su último partido.
Su hermano Wilfredo, conocido como «El Gamo de Jovellanos», fue el primero en conectar 2 mil imparables y es considerado uno de los mejores primeros bates de la pelota cubana.
Unos años después, fue el mismo Fernando quien le rompiera el récord de indiscutibles, luego de una racha negativa propiciada por la vergüenza que le daba protagonizar ese hecho.
Ambos son miembros del Salón de la Fama del matancero Palmar de Junco, el estadio en activo más antiguo del mundo.
Cada año, en honor a su cumpleaños, se organiza en su natal Jovellanos un partido de béisbol en el cual los miembros de su familia se enfrentan a un equipo de veteranos.
«El juego lo vamos a celebrar mañana sábado contra una selección de Mayabeque (provincia del occidente cubano, contigua a Matanzas)», aseguró a Prensa Latina, emocionado, tras ser felicitado por su onomástico.
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