Esta actitud de la nación norteña es incoherente y no tiene correspondencia con su discurso sobre la lucha contra el terrorismo, subrayó el jefe de Estado en la clausura del Segundo Periodo Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento).
Díaz-Canel exigió a las autoridades norteamericanas que investiguen y tomen medidas, así como hagan justicia contra elementos que profesan el terrorismo y acciones violentas.
Recordó que la historia de la nación caribeña recoge numerosos actos y crímenes perpetrados por personas vinculadas a la extrema derecha de Miami, en los que no se descarta la participación norteamericana.
El mandatario recalcó que las autoridades de la nación norteña hacen caso omiso a las amenazas de actos terroristas, “como si fuera posible ignorar que desde territorio norteamericano se facilita y financia el entrenamiento con apoyo logístico a grupos armados que desbordan mensajes de violencia por todos los medios a su alcance”.
Subrayó que la política de Estados Unidos hacia la isla representa un estímulo para la comisión de crímenes y la historia ha dado pruebas de ello.
“Tres años de una administración demócrata que actúa con total apego a su antecesor republicano, confirman que la hostilidad contra Cuba no responde a un Partido, sino a una política afincada en la pretensión hegemónica de un imperio incapaz de aceptar la soberanía de su pequeño vecino”, aseveró el dignatario. lam/mks