Hui resaltó las declaraciones de apoyo a China del presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, y el jefe del parlamento de la nación caribeña, Esteban Lazo, tras las recientes elecciones en Taiwán.
El diplomático resaltó que Cuba y China continuarán apoyándose firmemente, luchando contra la injerencia extranjera, el bloqueo y las sanciones, laborarán también por salvaguardar la soberanía y la dignidad nacionales y defender la justicia internacional.
Durante una conferencia denunció que la siniestra intención de Estados Unidos de incentivar la independencia progresiva de Taiwán es clara y peligrosa.
Hizo referencia a que la desinformación y la calumnia son las tácticas habituales de Estados Unidos, y la arbitraria injerencia en los asuntos internos de otros países es algo propio de la nación norteamericana.
Calificó como violaciones a la soberanía cubana, el bloqueo impuesto por Estados Unidos durante más de 60 años, la inclusión en la lista de Estados patrocinadores del terrorismo y la prolongada ocupación ilegal de la base Guantánamo para maniobras ocultas.
China, dijo, apoya firmemente la lucha justa del pueblo cubano para defender su soberanía nacional y rechazar la intervención y bloqueo, y aprecia los esfuerzos cubanos para combatir el terrorismo.
Durante su intervención reiteró que Taiwán es parte de China, y las elecciones de la región son un asunto territorial del gigante asiático y cualquiera que sea el resultado no cambiará el consenso universal de la comunidad internacional de adhesión al principio de una sola nación.
Las elecciones al liderazgo de la isla finalizaron con una victoria para el candidato del gobernante Partido Progresista Democrático, Lai Ching-te, quien es un separatista defensor de la independencia de la isla.
Por otro lado, de los 113 escaños de la legislatura, el Kuomintang chino obtuvo 52, el Partido Democrático Progresista 51, el Partido Popular de Taiwán ganó ocho y aquellos que no están afiliados a una de estas organizaciones políticas obtuvieron dos.
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