Al intervenir junto a otros líderes mundiales en la ceremonia fúnebre de Geingob, Lazo Hernández resaltó cómo desde la noticia de su fallecimiento Cuba expresó su gratitud hacia el exmandatario, quien exhibió una postura valiente, firme, independiente y solidaria hacia la Revolución cubana.
Esa actitud, agregó, se reflejó en contra del cerco económico impuesto sobre la nación caribeña por Estados Unidos desde hace más de 60 años y en ocasión de otros eventos que han afectado el bienestar del pueblo cubano.
Asimismo, estuvo presente en su posición y acciones por la consolidación de las relaciones bilaterales en diferentes sectores.
Recordó que, por esa postura, entre otros valores, Geingob fue merecedor de las dos condecoraciones más importantes que otorga la República de Cuba.
A saber, en 1995, siendo Geingob primer ministro, el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, le impuso la orden Carlos Manuel de Céspedes, y posteriormente, en 2022, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, le otorgó la Orden Nacional José Martí.
Esta última distinción, explicó Lazo Hernández, Geingob no la pudo recibir en vida, por lo que, reveló, él es portador de ella para entregarla a su viuda de manera póstuma.
El presidente del Parlamento cubano exaltó, además, el papel del exmandatario namibio como “un indiscutible líder africano”, desde la inserción en 1990 de la Namibia independiente.
Al respecto refirió que defendió con pasión no solo el derecho de su pueblo a forjarse como nación soberana, sino que contribuyó a cimentar la proyección internacional de Namibia, poniéndola en la vanguardia en la lucha por el desarrollo de los pueblos del tercer mundo y de África en particular, por la igualdad y la justicia.
Jamás olvidaremos a nuestro amigo, enfatizó Lazo Hernández en la ocasión.
Un Baobab ha caído, concluyó el presidente del Parlamento cubano, pero su ejemplo se multiplicará en los jóvenes que encarnan el futuro y que harán de Namibia un mejor país, como él lo soñó.
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