Mediante un comunicado, el mecanismo de integración repudió la campaña de descrédito y las acciones dirigidas a provocar un estallido social, con el fin de justificar una intervención externa en la nación caribeña.
El ALBA-TCP repudió además la postura de Washington de recrudecer el criminal e inhumano bloqueo económico, comercial y financiero contra la isla, en medio de la pandemia de Covid-19.
‘La Alianza repudia cualquier intento de desestabilización política contra Cuba y exige el levantamiento inmediato de todas la medidas coercitivas unilaterales aplicadas por Estados Unidos’, subrayó el bloque integracionista.
Asimismo, condenó los actos violentos promovidos y ejecutados por elementos delincuenciales, incluidos ataques al pueblo y las fuerzas del orden público.
El ALBA-TCP reiteró además su reconocimiento a la contribución de Cuba a la respuesta a la situación pandémica y saludó la cooperación médica de la isla en beneficio de decenas de países, como un ejemplo de solidaridad internacional.
Este lunes el presidente Miguel Díaz-Canel denunció la existencia desde hace varias semanas de una campaña mediática, principalmente gestada en las redes sociales, para manipular los sentimientos, crear inconformidad y estimular protestas en el país caribeño.
De manera oportunista, los promotores de esta iniciativa utilizaron como argumentos las carencias generadas por el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos, considerado el principal obstáculo para el desarrollo del territorio insular, indicó el mandatario.
Aseveró que Cuba es víctima de una estrategia de guerra no convencional con el objetivo de fracturar la unidad entre el pueblo, el Gobierno y el Partido Comunista, frente a lo cual reiteró el derecho y el deber de defender su proyecto socialista.
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