Así lo dijo en comparecencia radial y televisiva que encabezó el presidente Miguel Díaz-Canel, junto a varios miembros del gabinete.
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Marrero subrayó que el gobierno cubano chequea a diario el tema energético, el cual presenta una mejoría por la paulatina incorporación de plantas que presentaron roturas o precisaron de mantenimientos.
Indicó que el gobierno busca a toda costa evitar los ‘apagones’ -interrupciones- que afectan a la población, en medio de la difícil situación provocada por la Covid-19 y el recrudecimiento del bloqueo de Estados Unidos.
Al respecto adelantó que al día de hoy el país tiene una reserva de 133 MW que podrían asegurar el suministro eléctrico siempre que no ocurran roturas en las principales termoeléctricas.
Explicó que la situación óptima es contar con una reserva de 500 MW, para lo cual trabaja el Ministerio de Energía y Minas.
Marrero informó que la termoeléctrica de Felton, en el oriente de la isla, realiza su primera sincronización luego de una reparación capital.
Esa planta tiene una capacidad de generación de 260 MW que deben sumarse en la próxima semana.
La víspera sincronizó la termoeléctrica Antonio Guiteras, en el occidente, la de mayor capacidad de generación, luego de 18 días de reparaciones en su caldera.
El jefe de Gobierno comentó que la Guiteras ya aporta 234 MW de los 280 MW de los que puede producir.
Agregó que en agosto se estima que realice su primera sincronización la unidad seis de la planta del Mariel, también en el occidente, con un aporte de 100 MW adicionales.
Manuel Marrero apuntó que hay todo un proceso inversionista para ampliar las capacidades en las diversas formas de generación eléctrica.
Reconoció que ello es necesario, pues el sistema energético presenta vulnerabilidades y no escapa a las afectaciones provocadas por el bloqueo estadounidense.
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