De acuerdo con el doctor Francisco Durán, director nacional de Epidemiología, en conferencia de prensa tal número representa el 23,4 por ciento de la población cubana.
Además tres millones 196 mil 737 tienen puesta la segunda dosis y otros tres millones 833 mil 448 cuentan con la primera.
Las cifras anteriores suman nueve millones 650 mil 235 dosis aplicadas de los compuestos nacionales, en las diferentes modalidades que se llevan a cabo: intervención sanitaria y ensayos clínicos, detalló el directivo.
Abdala, una de las fórmulas utilizadas en la estrategia nacional de inmunización, recibió el pasado 9 de julio por la autoridad regulatoria nacional la aprobación para el uso de emergencia y de esta manera se convirtió en el primer producto antiCovid-19 desarrollado en América Latina.
Creada por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), su esquema de inmunización es de tres inyecciones y en la fase III de ensayos probó un 92,28 por ciento de eficacia, y un 100 por ciento ante la gravedad y el fallecimiento.
Por su parte, el candidato Soberana 02, diseñado por el Instituto Finlay de Vacunas (IFV) –que también se emplea para la inmunización de la población- junto a la propuesta Soberana PLUS, del mismo centro, demostraron 91,2 por ciento de eficacia en la fase III de ensayos.
Además, dicho esquema de dos dosis de Soberana 02 más una de PLUS también probó 100 por ciento de eficacia frente a la severidad y la muerte.
Cuba cuenta con otras propuestas antiCovid-19: Soberana 01 del IFV y Mambisa del CIGB, siendo esta última una formulación administrada por vía nasal que ya tiene autorizo por la entidad regulatoria para su ensayo clínico fase I/II en 120 voluntarios convalecientes, de conjunto con la vacuna Abdala.
Los recuperados de la Covid-19 incluidos en dicho estudio recibieron las primeras dosis de estos productos, anunciaron recientemente los líderes del estudio.
El proceso se dividió en cuatro grupos, a los cuales se les aplicaron los fármacos de manera aleatoria, en el caso de Mambisa a partir de spray nasal, dispensador en gotas o mediante un dispositivo cubano con jeringuilla, mientras que Abdala fue por inyección intramuscular.
Según la información declarada por el Registro Público Cubano de Ensayos Clínicos, los voluntarios, de La Habana, tienen entre 19 y 80 años, y deben llevar al menos dos meses de alta médica.
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