Bajo las ramas del centenario algarrobo – custodio de la casona levantada en pilotes de caguairán y testigo de historias y travesuras del pequeño Fidel- los reunidos allí rindieron tributo en su 95 cumpleaños, al hombre que trabajó hasta sus últimos días en favor de la justicia e igualdad social.
María Alejandra Muñoz, estudiante de preuniversitario, con voz fuerte y clara ratificó, que la continuidad de la Revolución Cubana está asegurada, pues ‘no cejamos en el empeño de mantener en alto la bandera de la Estrella Solidaria’.
En el lugar, declarado Monumento Nacional, recordó, además, la capacidad de liderazgo de Fidel, su impronta en la izquierda latinoamericana, así como su interés por la preparación de las nuevas generaciones y la importancia de la solidaridad con otros pueblos.
Por su parte, Yanet Hernández, miembro del Buró provincial de la Unión de Jóvenes Comunistas, en presencia de las máximas autoridades políticas y gubernamentales de Holguín, hizo referencia a la importancia de acudir cada 13 de agosto a ese sitio, donde ‘podemos estar más cerca del eterno Fidel’.
Puntualizó que la juventud holguinera está inmersa en el enfrentamiento a la Covid-19, lo cual se demuestra en los cientos de estudiantes y trabajadores voluntarios en centros de hospitalización, además en otras tareas productivas imprescindibles de la provincia.
De igual forma, destacó el compromiso en aportar más desde el estudio, el trabajo y la defensa de la Patria a la actualización del modelo económico cubano y el desarrollo social que impulsó el Comandante en Jefe.
El Conjunto Histórico de Birán, a unos 71 kilómetros de la ciudad cabecera de Holguín, lo comprenden 11 instalaciones, entre ellas la réplica de la casona central –destruida por un incendio en el año 1954- la oficina de correo, la escuelita , tienda pequeña, el bar La Paloma, el hotel y la valla de gallos.
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