Un toque de queda a partir de las 18:00, hora local, hasta las 04:00 del siguiente día, por un periodo no menor de cuatro semanas, figura entre las medidas extremas que aparecen en la carta enviada al gobernante a partir del examen de criterios médicos.
Según reportes oficiales, esta semana el país registró cifras de casos por encima de los cinco mil diarios y colapso de hospitales.
Las recomendaciones responden a tres posibles escenarios que el Grupo de Crisis trasladó la víspera a la Comisión de Salud como restringir la movilidad moderadamente, un cierre drástico o no hacer nada, lo cual implicaría 13 mil 525 muertes de aquí a noviembre próximo.
Ante la escalada actual, agudizada por la variante delta, los diputados instan al Gobierno a implementar intervenciones urgentes y resolutivas para aplanar la curva de contagios y de esa manera mitigar el colapso en el sistema público de salud por falta de insumos, medicamentos y personal sanitario.
Otras propuestas apuntan a prohibir todas las actividades deportivas colectivas y reuniones sociales con fines de celebración o conmemoración, volver a las clases a distancia y controlar los aforos en centros comerciales, según el color del semáforo Covid-19 en los municipios.
La preocupación creció más este jueves ante el anuncio del Laboratorio Nacional de Salud de la presencia de la variante de interés ‘Mu’ del coronavirus SARS-CoV-2, la cual se detectó por primera vez en Colombia en enero de este año.
Y si bien desde febrero último transcurre la vacunación de la población a nivel nacional gracias a donaciones, el país es uno de los más rezagados de Latinoamérica, ya que solo 1,2 millones de guatemaltecos tienen el esquema completo (dos dosis), de una meta de 16,3 millones.
Recién el Consejo de Ministros terminó una reunión de urgencia para dar vida a un decreto de Estado de Calamidad Pública, uno anterior fue rechazado por el Congreso, y la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia informó que Giammattei dirigirá un mensaje a la nación.
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