A su vez lamentó el rol asumido por el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou, al utilizar la voz que asume como país, para descalificar gobiernos de pueblos con los que se tiene relaciones diplomáticas, en alusión a Cuba, Venezuela y Nicaragua.
En cambio omitió la condena a países donde se aplica el terrorismo de Estado y violan los derechos humanos con una actitud totalmente injerencista y violatoria de la soberanía de las naciones y en contra de los principios de Derecho Internacional público de no intervención y la libre autodeterminación, contrasta una declaración emitida aquí.
La Mesa Política de la fuerza de izquierda uruguaya consideró muy positivo el cambio de rumbo propuesto por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador en materia de Política Exterior del Estado mexicano.
‘Demostró tener una visión clara, valiente y decidida en lo que respecta a los desafíos de la integración de América Latina y el Caribe en respuesta a la necesidad de promover una fuerte renovación en el vínculo entre nuestras naciones, independiente y autónoma de la voluntad de Estados Unidos y de su ejecutora política, la OEA’ resalta.
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