Según los datos provisionales difundidos este martes por el Banco de España, el endeudamiento del conjunto de las administraciones públicas se redujo 0,25 por ciento respecto a noviembre y repuntó 1,3 por ciento frente a diciembre de 2018.
En diciembre último, la deuda del país europeo bajó dos mil 950 millones de euros (0,25 por ciento) sobre el mes anterior, mientras que en tasa interanual (respecto a diciembre de 2018) creció en 15 mil 545 millones de euros, un 1,3 por ciento más.
El Ministerio de Asuntos Económicos calcula que este importe equivale al 95,5 por ciento del PIB, frente al 97,6 por ciento de un año antes, si bien la cifra definitiva del Producto Interno Bruto de 2019 no se conocerá hasta el próximo 31 de marzo.
Será entonces cuando el supervisor del sistema financiero establezca la ratio de deuda sobre el PIB.
La cartera de Asuntos Económicos destacó que la bajada de la ratio de deuda pública al 95,5 por ciento supone una reducción de 2,1 puntos sobre el cierre de 2018 y la cifra más baja desde 2012.
Antes del comienzo de la crisis económica en 2008, las obligaciones financieras de España ascendían a 384 mil millones de euros, suma equivalente al 35,5 por ciento del Producto Interno Bruto.
En opinión de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal -organismo supervisor de las cuentas del país-, la cuarta economía de la zona euro tardará tres lustros en reducir su deuda hasta el 60 por ciento del PIB, una meta inicialmente prevista para 2020.
Para este año, el recién estrenado Gobierno de coalición -integrado por el Partido Socialista y la alianza izquierdista Unidas Podemos- estima que la ratio de deuda pública sobre PIB será del 94,6 por ciento.
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