En la losa del aeropuerto internacional Nikola Tesla de Belgrado, lo despidió el primer vicepresidente del gobierno y titular de Asuntos Exteriores, Ivica Dacic, quien le agradeció por la estadía y dijo estar muy satisfecho por la manera fructífera en que transcurrió.
Lo calificó de gran amigo de Serbia y por eso cada visita que realiza constituye un acontecimiento extraordinario.
Lavrov, por su parte, agradeció el recibimiento y la hospitalidad de sus anfitriones serbios y la atmósfera constructiva en que transcurrieron sus encuentros.
El jefe de la diplomacia rusa llegó en la mañana de ayer para sostener de inmediato conversaciones con el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, centradas en las cuestiones más actuales relacionadas con Kosovo y la eventual reanudación del diálogo Belgrado- Pristina para procurar la normalización de las relaciones.
Posteriormente sostuvo un intercambio con Dacic en el que pasaron revista al estado de los nexos bilaterales y la cooperación de ambas partes en el ámbito internacional, así como desarrollar y ampliar los vínculos económicos, técnicos y comerciales.
Lavrov conversó con el vicepresidente del gobierno y ministro del Interior, Nebojsa Stefanovic y posteriormente ambos firmaron un acuerdo de cooperación para el rápido intercambio de informaciones en la lucha contra el terrorismo.
También, acompañado del ministro de Defensa, Aleksandar Vulin, recorrió una exposición organizada en 2019 en ocasión del 20 aniversario de la agresión a Yugoslavia de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y la valiente resistencia que Serbia protagonizó en los 78 días de bombardeos.
“No olvidamos la agresión de la OTAN contra Yugoslavia. Inclinamos nuestra frente ante las víctimas de ese crimen”, escribió Lavrov en el libro de visitantes.
El canciller de Rusia sostuvo una audiencia con el patriarca de la Iglesia Ortodoxa Serbia, Irinej, quien le expresó que espera la ayuda del pueblo y la iglesia rusos para encontrar la mejor solución y mantener a Kosovo dentro de Serbia.
También trataron sobre la ayuda rusa para la culminación de las obras de la catedral de San Sava en esta capital y la invitación al presidente de Rusia, Vladimir Putin, a tomar parte en la inauguración a fines de este año.
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