Según Francis Maseck, al frente de esa dependencia, existe constante comunicación entre las instituciones del Ejecutivo y el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (Mspas) para el intercambio de datos vitales con el fin de proteger la salud y la vida de la población.
En un comunicado oficial, Maseck aclaró que por medio del Mspas se trasladarán las decisiones a tomar sobre esta situación vinculada a la pandemia, así como las medidas de seguridad para prevenir su propagación, en respuesta al cierre de las fronteras con el Reino Unido por varios países europeos y latinoamericanos.
El reporte sobre la enfermedad en las últimas 24 horas sitúa a Guatemala a las puertas de los 133 mil casos acumulados de la Covid-19 a poco más de nueve meses de combate contra el coronavirus SARS-CoV-2 y en medio de pronósticos de un gran rebrote a principios de 2021.
Aunque la cartera de Salud emprende varias campañas de concientización ciudadana para evitar reuniones y fiestas por fin de año, los guatemaltecos parecen cansados de tantas restricciones y el relajamiento de las medidas de seguridad es evidente con solo observar las aglomeraciones en centros comerciales, mercados municipales y bazares navideños.
Este fin de semana hubo de nuevo congestionamientos viales en diferentes puntos de la ciudad con ruta al Atlántico, Interamericana, Pacífico y carretera a El Salvador, de acuerdo con voceros de la Empresa Municipal de Tránsito.
Amilcar Montejo calculó unos 600 mil vehículos circulando en el perímetro de la ciudad y, aunque es menor comparado con años anteriores, la cifra sigue siendo un número alto en una situación de emergencia por la Covid-19, alertó.
Autoridades sanitarias confirmaron que ya se aprecia un alza en la ocupación hospitalaria, sobre todo en salas de cuidados intensivos, lo cual podría llevar al colapso otra vez del sistema como en julio y agosto, cuando ocurrió un primer gran pico.
Hasta el corte del 19 de diciembre sumaban cuatro mil 656 los fallecidos y hay siete mil 115 contagiados activos.
El Mspas y el Gobierno argumentan que están en mejores condiciones para enfrentar una segunda ola de la enfermedad desde el punto de vista de insumos, pero el personal médico se encuentra agotado y muchos no han podido disfrutar ni sus vacaciones debido a la escasez de recursos humanos especializados.
La víspera, el Ejecutivo desmintió que fuera cierta la intención de implantar toque de queda a nivel nacional para fin de año como circuló en redes sociales, sin embargo, pidió mayor responsabilidad a los guatemaltecos.
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