La presentación de estos requerimientos tiene como fecha de entrega el 1 de agosto y los mismos incluirán nuevas obligaciones para la apertura de oficinas de representación de gigantes mediáticos y de Internet en la Federación de Rusia, informó el Kremlin.
Al frente de la coordinación del trabajo designaron al jefe de la Administración presidencial, Anton Vaino; y al primer ministro, Mijail Mishustin.
La medida responde a decisiones tomadas en una reunión del Consejo Presidencial para el Desarrollo de la Sociedad Civil y los Derechos Humanos, celebrada el pasado 10 de diciembre de 2020.
Entonces se pidió la presentación de un reglamento que obligue a las grandes plataformas de Internet extranjeras a registrarse como ‘sujetos en el ámbito jurídico ruso’, de manera tal que el país pueda dialogar con ellas de acuerdo con las normas de su legislación.
Sobre las nuevas normas, el mandatario ruso reconoció que ‘es posible mejorar el trabajo de estas estructuras en el territorio de nuestro país’, de tal manera que ‘no nos hagamos daño’.
Además, Putin pidió a su Gobierno elaborar y presentar para la misma fecha la conceptualización que adoptará el país de la protección de los derechos humanos y las libertades civiles en Internet y proveer un plan para elevar la alfabetización digital de la población.
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