El contagio se confirmó el miércoles en un empleado del principal hotel que acoge a los participantes del evento, lo cual provocó que más de 500 jugadores y personal de apoyo fueran puestos nuevamente en cuarentena y debieran someterse a otro test de coronavirus.
Sin embargo, el director del certamen, Craig Tiley, señaló este jueves que ‘confía absolutamente’ en que el torneo se celebrará sin inconvenientes según el programa establecido.
Por su parte, el primer ministro del estado australiano Victoria, Daniel Andrews, confirmó en rueda de prensa que todas las personas que pudieran estar vinculadas al caso positivo serán aisladas hasta recibir un resultado negativo.
Andrews añadió que no espera que este hecho tenga un impacto en el programa de la esperada competición, cuyo calendario fue atrasado tres semanas de la fecha de comienzo original para poder crear todas la condiciones biosanitarias para su celebración.
Ante esta situación, los organizadores del torneo decidieron retrasar un día el sorteo de los cruces o cuadros, que inicialmente iba a realizarse hoy.
Según el reporte de medios locales, el estado Victoria, que tiene a Melbourne como su capital, no había conocido ninguna contaminación local de Covid-19 desde hacía 28 días.
agp/rps