Durante una cumbre entre las partes, el mandatario abogó por mantener el impulso alcanzado en los últimos años y trabajar juntos para abrir un nuevo capítulo en los intercambios.
Destacó que las relaciones se sustentan en el principio del respeto mutuo e igualdad, no tienen condicionamientos políticos adicionales y se rigen por las consultas, contribuciones conjuntas y la ganancia compartida.
No obstante, Xi consideró pertinente reforzarlas más, propuso el enfrentamiento a la pandemia de la Covid-19 como un frente propicio y sugirió aprovechar, específicamente, las posibilidades en el tema de las vacunas.
También llamó a concentrarse en obras de infraestructura y conectividad, así como fomentar el desarrollo amigable con el entorno.
China estableció un mecanismo de cooperación con naciones de Europa central y oriental en 2012 y, según datos oficiales, sus intercambios mercantiles cerraron el año pasado por encima de los 100 mil millones de dólares.
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