Según anunciaron las autoridades, los equipos médicos ahora se están enfocando en trabajadores en estrecho contacto con el público y personas de 60 años o más, después de una primera fase que priorizó a más de un millón de trabajadores de salud.
La nueva fase comenzó con una inoculación masiva de la vacuna china CoronaVac, producida parcialmente en Indonesia, en el mercado textil Tanah Abang de Yakarta, hogar de unos 55 mil vendedores.
Se espera que esta segunda etapa de vacunación llegue a los trabajadores en mayor riesgo, como comerciantes, maestros, policías y funcionarios públicos.
El ministro de Salud, Budi Gunadi Sadikin, señaló en el mercado que muchos indonesios todavía le tenían miedo a la vacuna, pero puso como ejemplo al vicepresidente de 77 años, Ma’ruf Amin, quien fue inoculado esa mañana.
Con suerte, esto puede motivar a otras personas, especialmente a los ancianos, a vacunarse, declaró.
Se espera que la segunda etapa de vacunación concluya en mayo de 2021, e incluya a 38,5 millones de indonesios.
La nación de casi 270 millones de personas está planeando vacunar a más de 180 millones en general, pero los analistas estiman que esto podría llevar años.
Según datos oficiales, la pandemia ha infectado a casi 1,3 millones de personas y ha matado a más de 33 mil, aunque las bajas tasas de pruebas indican que las cifras podrían ser mucho más altas.
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