El artículo, suscrito por Juan Williams, comentarista de Fox New, evalúa el clima negativo que propaga la agrupación, que se identifica con el color rojo, sobre sus rivales políticos, a los que consideran ‘malas personas cuyas ideas destruirían el país’.
Si los demócratas tienen tan malas ideas, ¿cuáles son las buenas ideas que tienen el expresidente Trump y sus partidarios?, pregunta el analista.
La mayoría de los estadounidenses, el 68 por ciento, según la encuesta de la Universidad de Quinnipiac, piensa que el plan de estímulo económico del presidente Joe Biden es el camino correcto. ¿Dónde está el plan del Partido Republicano?, pregunta Williams.
Trump nunca presentó un plan mejor que el ObamaCare. No tuvo ninguna idea para lidiar con el Covid-19 más allá de decir hace un año que se acabaría antes de la Semana Santa de 2020. Eso fue hace más de 400 mil muertes, subraya.
¿Tenía Trump un plan mejor para ayudar a los niños hambrientos a conseguir una comida? El presidente Biden y los demócratas del Congreso tienen planes para destinar dinero a alimentar a los niños y aumentar el salario mínimo para sacar a más familias de la pobreza, sostiene.
El articulista pregunta ¿dónde están las ideas y los planes legislativos de los republicanos? y señala que el expresidente Donald Trump sí cumplió con más jueces conservadores. Eso fue un juego de poder político exitoso, puntualiza.
Asevera que Trump recortó los impuestos a favor de los ricos y las empresas, llevando el déficit a un nuevo nivel. En el mejor de los casos, dice, se trata de una política muy discutible y divisiva en una nación con una creciente desigualdad de ingresos.
La conclusión es que cualquiera que busque buenas ideas por parte de Trump y sus partidarios en el Congreso se encuentra con un silencio vacío y ruidoso, destaca Williams.
Incluso ahora, agrega, cuando Trump y Mitch McConnell se disputan abiertamente el control del futuro del partido, ambos bandos coinciden en que la mejor estrategia de cara a las elecciones de 2022 es unificar a los votantes republicanos atacando todas las ideas que vengan de los demócratas o de Biden.
La ausencia de ideas por parte de los republicanos es la prueba de un gran partido estadounidense atrapado en las garras de los extremistas, asevera el articulista.
El problema es que Trump sumió a gran parte de la base republicana con teorías conspirativas y retórica intimidatoria hasta el punto de que el partido no puede pasar de él y unirse al debate de ideas necesario para contribuir a un diálogo nacional productivo, concluye Williams.
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