Según la publicación, la medida incluye las transgresiones a las autoridades oficiales en mítines y la violación de los procedimientos para financiar acciones públicas.
La ley fue adoptada por la Duma Estatal (cámara baja del parlamento) el 10 de febrero y aprobada por el Consejo de la Federación (cámara alta) el 17 de febrero.
Para los ciudadanos, las sanciones por desobediencia reiterada a una orden legal o por obstruir el desempeño de las funciones de los agentes del orden en manifestaciones, mítines y otras reuniones serán de 10 mil a 20 mil rublos, o arresto de hasta 30 días o trabajo obligatorio de hasta 200 horas.
Anteriormente, el monto de estas multas era de cinco mil rublos (75 rublos es aproximadamente el equivalente a un dólar).
Para los funcionarios, las penas aumentaron de entre 10 a 20 mil a entre 20 y 40 mil rublos; mientras, para las personas jurídicas, las que eran de 50 a 100 mil ascendieron a entre 70 y 200 mil rublos.
La legislación aprobada eleva las sanciones por desobediencia a la policía, personal militar, empleados del sistema penal o de la Guardia Nacional, no solo en los mítines, sino en general.
Por una sola violación de este tipo, el castigo para los ciudadanos será de dos mil a cuatro mil rublos (antes era de 500 a mil rublos), o puede recibir arresto administrativo por hasta 15 días.
Entre otras medidas, la ley introduce nuevas sanciones de trabajo obligatorio por hasta 120 horas.
El Código de Infracciones Administrativas de Rusia complementa las medidas con multas de 10 mil a 20 mil rublos o trabajo obligatorio para quienes violen los procedimientos de recaudación y gastos de fondos en eventos públicos y las reglas para informar sobre estos.
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