El texto insta además a Estados Unidos a tomar todas las medidas para evitar esos sucesos trágicos y reafirma el compromiso de la nación caribeña con la Declaración Conjunta sobre materia migratoria, firmada el 12 de enero de 2017.
El país antillano cumple con rigor sus obligaciones en virtud de dicho acuerdo, ratifica el documento, que refiere los esfuerzos cubanos para luchar contra los actos de violencia y delitos asociados al fenómeno migratorio, como la trata de personas y el tráfico ilegal de migrantes.
La declaración señala como uno de los incentivos a la migración irregular la suspensión del procesamiento y otorgamiento de visas en el Consulado de Estados Unidos en La Habana y el traslado de los trámites hacia terceros países.
También, la vigencia de la Ley de Ajuste Cubano de 1966 y el incumplimiento por Washington del compromiso de garantizar un mínimo de 20 mil visas de migrantes por año.
La declaración detalla los hechos acontecidos a inicios del presente mes, cuando varias personas que participaban en una salida ilegal naufragaron cerca de Bahamas, lo cual derivó en la muerte de una de ellas y la desaparición de otras.
En el recuento de los sucesos el texto precisa que el 2 de marzo ese grupo partió por la costa norte de la provincia de Villa Clara (centro), en una incursión de lancha rápida organizada desde la nación norteña.
Los traficantes de personas condujeron a todos los que viajaban a bordo de la embarcación, incluidos mujeres y niños, a un cayo deshabitado del banco de sal en Bahamas, sobre lo cual las Tropas Guardafronteras de Cuba informaron en tiempo real al Servicio de Guardacostas de Estados Unidos.
En ese lugar fueron recogidos por otra lancha, también procedente de territorio norteamericano y con matrícula de Florida, pero el 4 de marzo zozobró a tres millas náuticas de Cayo Sal, Bahamas.
Del total de personas participantes solo 12 logró rescatar un buque de la Real Fuerza de Defensa de Bahamas, así como un cadáver, pero autoridades de ese país estiman que hay varios desaparecidos, entre los cuales se cuentan mujeres y dos niños.
El documento de la Cancillería añade que las labores de búsqueda naval y aérea continuarán cuando mejoren las condiciones hidrometeorológicas y se mantienen las investigaciones para esclarecer los hechos.
Hasta la fecha está sujeto a proceso judicial un individuo devuelto a Cuba como supuesto emigrante por el Servicio de Guardacostas de Estados Unidos, quien es uno de los lancheros involucrados en la operación.
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