A juicio de los expertos, en la tradición de los afamados galardones de exigua, poca o nula se puede resumir la visibilidad de artistas negros, mujeres, latinos, asiáticos, países africanos y otros grupos de minorías en esa nación que tanto pondera la igualdad de oportunidades.
Sin embargo, las consecuencias de la pandemia de la Covid-19 trajeron para la industria cinematográfica un atípico panorama, que también resultó variable en la elegibilidad de ‘lo mejor del cine estadounidense y mundial’.
Representados en la figura de Chadwick Boseman, Andra Day, Viola Davis, Daniel Kaluuya, Leslie Odom Jr. y LaKeith Stanfield, los artistas de piel negra dijeron presente el pasado 15 de marzo cuando se anunciaron los afortunados en sus más de 20 categorías en competencia.
Boseman, conocido por su papel en la película Black Panther y fallecido el pasado 28 de agosto de 2020, marcó un hito al convertirse en el primer actor negro en ganar una nominación póstuma al Oscar, según refiere la revista digital Espinof.
El sitio destaca el camino que abrieron Mia Neal y Jamika Wilson para la raza, competidores por la estatuilla al Mejor Maquillaje y Peluquería; en tanto Judas y el mesías negro es la primera cinta con un equipo de producción sin blancos que aspira a la prima como Mejor Película’.
De acuerdo con estadísticas registradas por algunos medios, con esta cuarta postulación Davis se convirtió en la actriz afroamericana con más nominaciones, esta vez a Mejor Actriz por la cinta La madre del blues.
El sello femenino implantó su marca con la presencia de 70 mujeres en 76 nominaciones, encabezadas por la cineasta china-estadounidense Chloé Zhao en las categorías de Mejor Dirección, Guion Adaptado, Edición y Mejor Película.
Zhao, la directora de Nomadland sostiene el récord de ser la primera mujer en recibir cuatro nominaciones en un mismo año y la primera fémina no blanca nominada a Mejor Dirección, disputa que sostiene con su colega Emerald Fennel, de Promising Young Woman.
Por si fuera poco, las sorpresas continúan. La candidatura de ambas realizadoras en esta división rompe otro paradigma en los 93 años de los Premios Oscar, pues nunca antes dos mujeres habían aparecido en el listado de quienes lideran la cinematografía en la industria del cine.
Mientras, el apartado de Mejor Actor dejó relucir el nombre de Steven Yeun como el primer asiático-estadounidense en ser nominado en esa sección por el filme Minari y en la misma categoría, Riz Ahmed, de Sound of Metal, brilló como el primero de estirpe pakistaní.
La aparente igualdad que pretende mostrar la institución fue visible con la elección de la surcoreana Youn Yuh-jung, primera en representar a su país como Mejor Actriz de Reparto.
Cualquiera pudiera decir que la deuda de inclusión está saldada y se oxigenó un asunto pendiente para la entidad y reclamado con mayor fuerza en los últimos años.
Sin embargo, la presidenta ejecutiva de la academia, Dawn Hudson, es consciente de los retos que aún debe solventar la institución y aseveró ‘trabajan para asegurar oportunidades equitativas de manera global’.
‘(…) La necesidad de abordar este asunto es urgente. Por eso, modificaremos —y continuaremos examinando— nuestras reglas y procedimientos para asegurarnos de que todas las voces son escuchadas y celebradas’, significó.
Según informó la propia organización insigne del cine de Hollywood, se tendrán en cuenta nuevos estándares de representatividad que comenzarán a aplicarse en la ceremonia de entrega 96, prevista para 2024.
Para esa fecha la inclusión influirá en la elegibilidad de los largometrajes en el momento de ser nominados para garantizar y asegurarse de que ‘todas las voces son escuchadas y celebradas’.
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