La portavoz del Gobierno español, María Jesús Montero, confirmó en una rueda de prensa el fin de esa medida a partir del 30 de marzo, aunque las limitaciones por la misma causa se mantendrán para las llegadas desde Brasil y Sudáfrica.
Tras el fin de la prohibición, los ciudadanos británicos deberán ahora someterse a las mismas reglas del área Schengen (espacio europeo de libre circulación), que obliga a llevar una PCR negativa realizada 72 horas antes de viajar.
Por el contrario, el Ejecutivo optó por mantener las restricciones a los vuelos procedentes de Brasil y Sudáfrica para tratar de evitar la expansión de las cepas del virus originadas en esas naciones, que ‘todavía tienen poca prevalencia en España’, dijo Montero.
De esta forma, prorroga por cuarta vez las prohibiciones (iniciadas en febrero), que estarán en vigor desde el 30 de marzo al 13 de abril.
Al igual que otros países, España suspendió a fines de diciembre la llegada de pasajeros de Reino Unido, salvo españoles y residentes, por la transmisión de la variante del SARS-CoV-2 descubierta en territorio británico, aparentemente más contagiosa.
Por el mismo motivo, a principios de febrero extendió esa prohibición a las llegadas de Brasil y Sudáfrica.
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