Según la cadena Franceinfo, el año pasado se registraron mil 276 acciones hostiles, como mensajes insultantes en el domicilio de los funcionarios, amenazas de muerte y ataques físicos, un incremento del 200 por ciento en relación con el 2019.
Las elecciones municipales pudieran explicar en parte el escenario vivido, sobre todo por los regidores, pero no es la única razón, precisa.
Para la Asociación de Alcaldes de Francia, el problema viene avanzando desde hace años, con más de 500 de sus miembros agredidos físicamente en 2020, la misma suerte corrida por 60 parlamentarios.
Por su parte, el Ministerio del Interior registró 68 casas y 63 vehículos de autoridades electas, blancos de algún tipo de acto hostil en suelo galo.
En este contexto, la Gendarmería activó un programa de capacitación para que los afectados estén en mejores condiciones a la hora de lidiar con ataques.
Creo que va de mal en peor, cuando yo era pequeño, jamás escuché acerca de un alcalde agredido, dijo el burgomaestre de la sureña población de Lasalle, Henri Delatour.
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