‘Esto es imposible. Los estadounidenses ahora están repitiendo como un mantra: hablaremos con todos desde una posición de fuerza’, apuntó el secretario de prensa de la Presidencia rusa, quien dijo que ningún dirigente ruso permitirá que ‘ni los estadounidenses ni nadie más nos hable así. Esto está fuera de discusión’, subrayó.
Al ser preguntado sobre la posibilidad de una ruptura de las relaciones diplomáticas con la Casa Blanca, manifestó que no le gustaría ‘hablar de escenarios extremos’.
Sobre posibles temas comunes para dialogar con Washington, Peskov citó los vinculados con la estabilidad estratégica, el control de armas y el arreglo de conflictos regionales ‘en los que la presencia de Estados Unidos puede tener algún significado práctico’, aclaró.
Señaló que también es necesario conversar sobre el Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC) vinculado al programa nuclear iraní, abandonado por el expresidente Donald Trump, y acerca de ‘muchas otras situaciones problemáticas en el mundo’, indicó el portavoz del Kremlin.
Las relaciones entre Moscú y Washington empeoraron en las últimas dos semanas luego de que el presidente norteamericano, Joseph Biden, en una entrevista con el canal ABC, dijera que Rusia deberá ‘pagar el precio’ por su supuesta injerencia en las elecciones estadounidenses.
En la misma conversación con la prensa, el mandatario estadounidense respondió de forma afirmativa cuando se le preguntó si consideraba a Putin un ‘asesino’.
Tanto la Casa Blanca como el Departamento de Estado declararon que Washington espera una cooperación constructiva con Moscú en áreas de interés mutuo, pero que no se suavizarán las actuales discrepancias bilaterales.
El presidente Putin advirtió por su parte la pasada semana que Rusia cooperará con Estados Unidos solo en términos favorables. ‘Trabajaremos con ellos, pero en aquellas áreas que nos interesen y en aquellas condiciones que consideremos beneficiosas para nosotros’, agregó.
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