El informe precisa que la emergencia sanitaria mundial por causa de la Covid-19 impactó directamente en el desempeño económico de los países de la región y el planeta, con daños en la movilidad de las personas y el normal funcionamiento de establecimientos productivos y comerciales.
‘Esto fue determinante para que en 2020 el Producto Interno Bruto (PIB) del Ecuador, en términos constantes, haya totalizado 66 mil 308 millones de dólares, lo que representa una caída de 7,8 por ciento’, asevera el ente financiero.
De acuerdo con los datos, el decrecimiento responde a una simplificación del 11,9 por ciento de la formación bruta de capital fijo y de siete puntos porcentuales en el gasto de consumo final de los hogares, ante la reducción de las operaciones de crédito de consumo otorgadas por los sistemas financieros privado y de la economía popular y solidaria.
El Banco Central estimó que también tuvo responsabilidad la caída del 6,1 por ciento del gasto de consumo final del gobierno general, debido a una baja en las remuneraciones con respecto al año anterior, así como a una menor ejecución en el presupuesto del Estado.
De otro lado, las importaciones de bienes y servicios fueron inferiores en 7,9 por ciento a las registradas en el 2019 y hubo contracción en las exportaciones de bienes y servicios en 2,1 puntos.
En ese mismo contexto, el sector petrolero tuvo una contracción en su Valor Agregado Bruto de 9,8 puntos, por un deterioro en el desempeño en la extracción de crudo, asociado en cierta medida a la ruptura del Sistema de Oleoducto Transecuatoriano en abril de 2020, cuya recuperación ha sido lenta.
Por otro lado, el Valor no petrolero mostró igualmente un decrecimiento de 6,6 por ciento en el contexto del confinamiento y de una progresiva recuperación de la actividad económica, lo que reflejó una menor dinámica en industrias como: transporte, alojamiento y servicios de comida y construcción, entre otras.
No obstante, hubo sectores que experimentaron cierto crecimiento durante el período evaluado como la acuicultura y pesca del camarón, con una tasa positiva de 5,2 por ciento, debido a una mayor demanda del producto en el mercado externo, mientras el correo y las comunicaciones tuvieron un ligero movimiento del 0,1 por ciento.
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