El senador colombiano Gustavo Petro envió una carta al presidente Iván Duque, en la que sugirió la producción en el territorio nacional de los inmunizantes cubanos una vez terminadas las fases de ensayos clínicos
Colombia ha recibido millones de dosis de los fármacos disponibles en el mundo para combatir la pandemia, pero la cantidad dista de la necesaria para lograr la llamada inmunidad colectiva y cortar la cadena de contagios.
En el caso del virus SARS-CoV-2, causante de la Covid-19, especialistas consideran que se puede hablar de inmunización colectiva cuando se ha vacunado al 70 por ciento de la población de un país, cifra que al ritmo actual Colombia alcanzaría en casi dos años más.
De ahí el pedido de tener en cuenta las vacunas de Cuba, un país con reconocidos resultados en la producción de medicamentos, en especial de inmunizantes con excelentes resultados en el tratamiento a diferentes enfermedades.
Petro solicitó al mandatario valorar la posibilidad de adquirir y producir el fármaco cubano teniendo en cuenta los resultados de los ensayos clínicos y la opinión de instancias como la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Duque ‘debería establecer un acuerdo de producción de vacunas cubanas en Colombia, pero lo ciega el sectarismo’, señaló el representante del partido Colombia Humana en referencia a la animadversión que profesa hacia La Habana la derecha colombiana, incluido el partido de gobierno Centro Democrático.
El legislador destacó. además, la importancia de los fármacos por ser los únicos de su tipo hechos en América Latina, propósito más destacable aun por estar la isla caribeña sometida por parte de Estados Unidos a un bloqueo económico financiero y comercial sin precedentes en la historia de la humanidad.
Si la vacuna cubana es exitosa como anuncian, compartió en Twitter, no solo es la única vacuna latinoamericana, sino que es más eficiente que la mayoría en el momento.
La OPS aplaudió la producción de Soberana 02 y Abdala y otros tres candidatos vacunales, lo que consideró un privilegio, aunque no un milagro dado la notable trayectoria de Cuba en la investigación y producción de este tipo de medicamentos.
‘No se trata de ningún milagro: existe un notable desarrollo científico en Cuba y una experiencia de 30 años en fabricar vacunas’, comentó al rotativo español El País el representante de la OPS/OMS en Cuba, José Moya.
La periodista y escritora colombiana Patricia Lara Salive también llamó la atención sobre el tema en el artículo ‘Presidente y minsalud, entren en razón’ publicado por el diario El Espectador.
En el texto la intelectual señala que ‘ha llegado el momento de que el presidente Iván Duque abandone su sectarismo, componga la relación con Cuba e importe sus vacunas, para que termine de inmunizar este año a toda nuestra población’.
Lara señala que más allá del origen del fármaco lo importante es su propósito y las evidentes ventajas de tener a Cuba como proveedor, además de mencionar los otros candidatos vacunales como Soberana 01 y Soberana Plus, ya en fase II y considerada para niños, mayores de 80 años y convalecientes de Covid-19.
Pero lo más interesante, destaca la periodista, es que Cuba puede transferir a Colombia, en muy poco tiempo, la tecnología para montar su propia producción de vacunas en la fase final.
La legisladora María José Pizarro abordó el tema en una encuesta en la red social Twitter, donde a la pregunta ‘¿Estaría de acuerdo con que Colombia adquiera o produzca la vacuna cubana para ayudar a superar la crisis de la Covid-19 en el país?’, el 70,1 por ciento de los interrogados dijo sí.
Cuba aboga por un mundo inclusivo y equitativo en materia de salud y lleva adelante una política consecuente con esos principios; la nación caribeña es crítica hacia el acaparamiento de las vacunas antiCovid-19 y en cambio colabora con varios países en el desarrollo de estos fármacos, que una vez concluidas las diferentes fases de estudio se beneficiarán con la producción en plantas propias.
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