El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, consideró que los datos de la infección del coronavirus SARS CoV-2, causante de la enfermedad, permiten tomar decisiones para descongelar la economía, pero el optimismo debe ser cauteloso, acotó.
Lo peor ya pasó, pero todavía hay unas 25 mil personas en hospitales y tres mil luchan por sus vidas en cámaras de ventilación, declaró el jefe de Gobierno, citado por el diario Wyborcza.
Morawiecki afirmó que la dinámica de los indicadores epidémicos depende de un nuevo calendario de acción.
Las camas en los hospitales están aseguradas, pero debemos abordar esta flexibilización largamente esperada con humildad, porque el virus no desaparecerá de la noche a la mañana, y la epidemia no se comporta de una manera ‘lineal’, opinó.
Polonia reabre la hostelería y los centros comerciales, pone fin a la obligación de llevar mascarilla en lugares públicos y retoma las clases presenciales para los estudiantes de primaria antes de finalizar el mes venidero.
Así, desde el 1 de mayo se permitirá la práctica de deportes en instalaciones al aire libre, con un límite de 50 personas, y se abrirán piscinas cubiertas para grupos organizados de niños y jóvenes, con limitación de un 50 por ciento de ocupación.
Para el 4 de mayo, está prevista la reanudación del trabajo de museos y galerías de arte, aunque con público limitado, como mismo lo harán centros comerciales, tiendas de construcción, muebles y templos, señaló la televisión capitalina.
El 8 de mayo próximo reinician su actividad hoteles y alojamientos turísticos con la mitad de su ocupación, pero sin abrir al público los restaurantes, saunas ni spas.
Las autoridades prevén eliminar el uso de mascarillas en zonas públicas si se logra un registro de menos de 15 casos positivos por cada 100 mil habitantes. Polonia acumula dos millones 776 mil 927 casos, incluidos 66 mil 533 fallecidos.
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