Medios de prensa señalan que los investigadores consultaron imágenes de satélite de la región y determinaron que estas olas masivas estaban en el área en el momento del hundimiento.
Según especialistas, tales olas son invisibles, pero tienen la fuerza para arrastrar un submarino a profundidades peligrosas.
El contralmirante Iwan Isnurwanto, comandante de la Escuela de Comando y Estado Mayor de la Armada de Indonesia, declaró que la ola puede haber subido desde el fondo hacia el norte, por una trinchera entre dos montañas.
Si el submarino fue derribado por tal ola, probablemente se inclinó, haciendo que todos los miembros de la tripulación rodaran hacia abajo. Tenemos que hacer más investigaciones, pero es muy probable que eso sea lo que pasó, dijo Isnurwanto al portal Nikkei Asia.
La Marina señaló anteriormente que una falla eléctrica podría haber dejado al submarino incapaz de ejecutar los procedimientos de emergencia para resurgir, y otro informe apunta a un ataque con misiles.
Un robot submarino, equipado con cámaras, fotografió la embarcación perdida, que tenía 53 tripulantes, que yacía en al menos tres pedazos en el fondo del océano a una profundidad de dos mil 750 pies.
Indonesia informó que rescatará el KRI Nanggala 402 desde el fondo del mar, para lo cual espera la llegada de dos barcos equipados para manejar operaciones de salvamento en aguas profundas.
Este viernes, las familias de las víctimas arrojaron flores desde un barco de la Armada a las aguas donde se hundió el submarino, desaparecido el 21 de abril.
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