En su cuenta en la red social Twitter, el mandatario escribió, ‘hace un año el pueblo venció el intento de invasión terrorista con gallardía y heroicidad. Logramos derrotar una vez más al imperio estadounidense. Estamos destinados a vencer como los Libertadores en Carabobo’.
El tres de mayo de 2020 Venezuela amaneció con la noticia de un intento de desembarco mercenario por las costas de Macuto, estado de Vargas, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, junto a los órganos de seguridad e inteligencia del Estado abortaron la incursión terrorista por varios puntos de la costa y capturaron a decenas de efectivos paramilitares y mercenarios.
En las investigaciones posteriores se demostró el vínculo de la empresa estadounidense Silvercorp en la operación y evidenció una vez más la escalada en la guerra no convencional promovida contra Venezuela desde Washington, en contubernio con sectores extremistas.
La compañía, propiedad del veterano de las fuerzas especiales norteamericanas Jordan Goudreau, dirigió el entrenamiento de mercenarios en campamentos ubicados en Colombia ante la mirada cómplice de las autoridades neogranadinas, de acuerdo con evidencias aportadas por el Gobierno bolivariano.
Los términos de esa acción, donde se pretendía entre otras cosas asesinar a dirigentes del gobierno y secuestrar al jefe de Estado para su posterior ejecución, quedaron plasmados en un contrato firmado por Goudreau y la extrema derecha venezolana, encabezada por el diputado Juan Guaidó, reconocido por la Casa Blanca como ‘presidente encargado’.
De igual forma se presentaron pruebas de la implicación de la Inteligencia colombiana en esas acciones.
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