Las redes sociales inundadas de mensajes de amor y las videollamadas son otros de los principales mecanismos para homenajear a la mujer ecuatoriana, que ha puesto en práctica todas sus habilidades para seguir dando amor mientras entabla un férreo combate a la Covid-19, vigente hace más de un año.
Por estos días, desde la noche del viernes, cuando comenzó el toque de queda ininterrumpido hasta las 05:00 (hora local) del lunes, las calles solo están ocupadas por repartidores a domicilio, que además de regalos o deliciosas comidas, entregan un poco de esperanza y aliento, pese a la distancia.
Múltiples son las iniciativas para este día, que van desde conciertos virtuales gratuitos a espectáculos más privados (pagados), collages con fotos familiares o compartir desde diferentes puntos, a la misma hora, una comida familiar.
Conversaciones, sonrisas, sorpresas online y mensajes de ánimo con las frases: ‘nos abrazaremos pronto’ y ‘te amo’ son recurrentes a lo largo y ancho de todo el país.
Es que la pandemia de la Covid-19 impone el distanciamiento, pero cuando hay cariño, las vías para demostrarlo aparecen.
Especial homenaje se rinde también a la madre en la primera línea de batalla a la enfermedad (militares, profesionales de la salud, servidoras públicas, emprendedoras), quienes conmemoran la jornada en el campo de batalla.
La ‘mamá pulpo’ le llaman muchos a esas mujeres que acopladas al teletrabajo, multiplicaron sus funciones y se convirtieron en maestras, por las clases virtuales y en psicólogas, al propiciar un ambiente de armonía e intentar apaciguar los deseos de sus hijos de hacer reuniones, fiestas o simplemente compartir con sus grupos de amigos.
‘Mamá maga’, le dicen otros, pues las 24 horas le alcanzan para y siempre dejan tiempo para la necesaria conversación e intercambio de risas que animan a seguir en la lucha, con la madre como bandera.
En Ecuador, se viven circunstancias especiales, pero el tributo a las progenitoras, no pasa por alto.
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