Con la particularidad de ofrecer una experiencia única que combina la apreciación del arte y el ejercicio físico, la muestra se ubica en el centro histórico Pilane; antiguo campo de tumbas de la Edad de Hierro del archipiélago de Bohuslän.
Las instalaciones de los españoles Joan Coderch, Javier Malavia y Jaume Plensa, así como las piezas del británico Tony Cragg, comparten el espacio con los más de 90 monumentos antiguos presentes en esa combinación de llanos y pequeñas montañas rocosas, como círculos de piedra, túmulos funerarios y menhires (monumento megalítico).
Fundada en 2007 con el propósito de fusionar las creaciones modernas con la historia, la iniciativa Skulptur i Pilane (Escultura en Pilane), acoge anualmente a miles de personas, aunque este año no admite grandes grupos de visitantes y el recorrido queda por cuenta del público, detalla la página web oficial.
Asimismo, el sitio detalla que los interesados en esta experiencia podrán disfrutar de un día de campo tradicional, con picnic, senderismo, entre otros atractivos, sin descuidar los protocolos sanitarios.
Protegida por la Junta de Patrimonio Nacional de Suecia, la tierra que se renta también para pasto de ovejas, constituye por estas fechas el hogar de la pieza Aprendiendo a volar, inspirada en la leyenda griega de Ícaro; así como Gigante de Sal, la cual reflexiona sobre la capacidad de resiliencia ante desgracias como la Covid-19.
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