Tras defender la decisión de su gobierno de brindar atención médica al líder del frente Polisario (movimiento independista saharaui) Brahim Ghali, González Laya en diálogo con el periódico La Razón expuso la voluntad de restablecer con Rabat un clima de entendimiento basado en el respeto.
Aclaró que con la asistencia humanitaria a Ghali, España no alteró su posición con respecto a su excolonia del Sahara Occidental, que Marruecos reclama como suya.
‘España no ha cambiado su postura. Este contencioso necesita una contención política que tiene que ser negociada en el marco de Naciones Unidas porque eso es lo que va a garantizar una legitimidad y una paz estable y duradera’, explicó la canciller, con cerca de año y medio en el cargo.
Interrogada sobre una anticipación del gobierno a la respuesta marroquí, la titular explicó que un gesto humanitario de Madrid de ningún modo debió tener como respuesta una crisis migratoria de niños muy menores como se vio en Ceuta.
Tenemos una tradición humanitaria, explicó al reconocer que también existe en su vecino.
Acerca de un fin del conflicto bilateral, González Laya dijo que su país no lo promueve.
Reconoció que funcionarios del gobierno tuvieron encuentros con la embajadora de Rabat aquí, Karima Benyaich.
Ha habido conversaciones de distintas personas a distintos niveles y me gustaría mantener la discreción de la diplomacia porque es lo propio de una relación madura, acotó.
Sobre el tema de que el presidente estadounidense Joe Biden no haya contactado al jefe de gobierno Pedro Sánchez a pesar de hacerlo con otros 30, la jefa de Exteriores dijo que no existe ningún problema.
‘Estados Unidos y España tienen una relación madura, profunda y sólida (…) Es cierto que no ha ocurrido esta llamada. Pero tampoco ha ocurrido con docenas de países del mundo, países con los que Estados Unidos también comparte relaciones muy sólidas’, manifestó.
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