Según detalló la Administración Estatal de Deportes, la idea es tener esas localidades listas en 2025, cada una albergará al menos dos clubes profesionales, un centro de entrenamiento a jóvenes talentos y otros para preparar a los principiantes.
La mitad de los estudiantes de las ‘ciudades-fútbol’ deben estar vinculados a la disciplina, por cada 10 mil personas habrá una cancha y se alentará las prácticas desde la niñez.
La Administración y la Asociación china de Fútbol aportarán al año más de mil 500 millones de dólares al desarrollo del deporte y los gobiernos locales deben invertir otros cuatro mil 500 millones si quieren sumarse al proyecto.
Además, se introducirán estrategias para garantizar que esos sitios contribuyan al sueño de China de ser potencia deportiva en 2035.
Junto al plan de establecer una sociedad moderna, el gigante asiático concede especial atención a dicho sector, busca sumar a la mayor parte de la población a la actividad física y que esa industria se convierta en uno de los nuevos pilares del progreso económico.
Con ese afán el Gobierno optimizará el desempeño competitivo de los atletas para que logren mejores actuaciones en certámenes globales, ampliará los intercambios internacionales y se prevé que en 15 años el 45 por ciento de los chinos hagan ejercicios regularmente.
Además, abrirá 10 mil guarderías para despertar desde tempranas edades la pasión por el balompié.
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