El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo a periodistas que estos fueron los temas centrales de la conversación de los mandatarios, aunque reconoció que también analizaron los acontecimientos vinculados con el aterrizaje de emergencia del vuelo de Ryanair en Minsk, el pasado 23 de mayo.
Al referirse a la ‘oleada de emociones’ desatada por el tema, según Putin, el vocero de la Presidencia rusa aclaró que para Moscú, la situación requiere un examen reflexivo y constructivo, según la agencia de noticias TASS.
Manifestó que ‘la cascada de conclusiones apresuradas’ lanzadas por las capitales occidentales, incluida la Unión Europea, sugiere un enfoque alejado del interés de esclarecer realmente las circunstancias y más apegado a las emociones.
Peskov comunicó que en el encuentro entre ambos jefes de Estado, la parte belarusa proporcionó toda la información necesaria sobre el incidente. ‘Si hay alguna pregunta adicional, entonces Minsk estará listo para proporcionar otros datos’, comentó.
Putin planteó a Lukashenko el problema de la ciudadana rusa Sofia Sapega, detenida en Minsk, y sobre la cual Moscú no es indiferente a su destino, dijo el jefe de la oficina de prensa de la Presidencia rusa.
Al mismo tiempo, señaló que el Kremlin tiene en cuenta que Sapega tiene permiso de residencia en Belarús, por lo cual ‘partimos de la premisa de que todo debe tener lugar dentro del marco de la ley’.
Indicó que el presidente Putin instruyó al Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia monitorear el destino del caso de la ciudadana rusa de la manera más cuidadosa.
Putin y Lukashenko instruyeron a los ministerios de Transporte de los dos países para organizar todos los aspectos vinculados con el tráfico aéreo, teniendo en cuenta el próximo período de vacaciones y el gran número de belarusos interesados en viajar al mar Negro.
También, para buscar opciones que faciliten el regreso ‘a su tierra natal’ de ciudadanos que no tienen como volver al país tras la suspensión de vuelos hacia Belarús por varias capitales europeas y la prohibición de volar a estos destinos a las aerolíneas belarusas.
Peskov subrayó que la reunión entre Putin y Lukashenko fue constructiva y rica en contenido, además de reiterar que esta es solo una de una serie de contactos permanentes ruso-bielorrusos al más alto nivel.
Apuntó que la relación especial entre los dos países, incluida su interacción dentro del Estado de la Unión, ‘hace absolutamente necesario el carácter permanente de estos contactos’.
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