Una descarga eléctrica a pocos metros del agua cegó la vida de Díaz, que a sus 22 años se entrenaba para conseguir aquí el boleto a Tokio-2020 en los Juegos Mundiales de la Asociación Internacional de Surf (ISA).
La tragedia conmocionó al país y a la comunidad surfera, que despidió a Díaz con un ‘Paddle Out’, ritual de origen hawaiano que celebra la vida y el legado de los amantes de este deporte extremo.
Aquella tarde El Tunco, una de las mejores playas del mundo para la práctica del surf, se llenó de flores blancas y personas vestidas de igual color, quienes hicieron una remada simbólica para despedir a Díaz.
Los tributos fueron reanudados ahora en el torneo disputado en la zona también conocida como ‘Surf City’, donde incluso el presidente Nayib Bukele evocó la pasión de Kathy al saludar a los competidores.
‘Ahora ustedes montarán estas olas, sintiendo el sol que ella sentía, caminando en la arena que ella caminaba, rindiéndole honor en el lugar que ella amaba’, destacó Bukele en la inauguración del evento.
El ídolo local Bryan Pérez, medallista de bronce en los Panamericanos de Lima-2019, también rindió un tributo a Díaz, al llegar a la sede de la competencia con una fotografía de Katherine Díaz a manera de homenaje.
Además, tras avanzar a segunda ronda luego de obtener el mejor puntaje del domingo, Pérez dedicó el resultado a los salvadoreños, y en especial ‘a Katerine Díaz, que nos ve en el cielo’.
La surfista ecuatoriana Mimi Barona, amiga de Kathy, elevó antes de saltar al agua una manta con fotografías de Díaz, como tributo.
Hermana de José ‘Bamba’ Díaz, presidente de la Federación Salvadoreña de Surf, Katy era subcampeona nacional del Open Femenino-2020 y aspiraba a conseguir un cupo para la venidera lid olímpica.
Este torneo reúne a 256 surfistas de 51 países, que lucharán por uno de los 12 boletos disponibles a Tokio-2020, ante leyendas como Ítalo Ferreira o Sally Fitzimmons.
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