Las informaciones preliminares dan cuenta del estallido de un cilindro de gas en los alrededores de un restaurante en el barrio de Kadhimiya.
Algunas fuentes no descartaron una operación terrorista que culminó con la detonación y por ese motivo hay un despliegue de fuerzas de seguridad en toda la ciudad.
Aunque el gobierno proclamó en diciembre de 2017 la derrota total del Estado Islámico, células durmientes de ese grupo extremista mantienen operatividad con acciones esporádicas como la de marras.
También realizan ataques contra aldeas y localidades ubicadas en lugares alejados e inhóspitos, donde hay pocas garantías de seguridad.
En meses recientes, las Unidades de Movilización Popular, un cuerpo armado irregular bajo mando de las Fuerzas Armadas de Iraq, acometió una operación limpieza contra esas agrupaciones radicales.
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