Lee expresó este viernes, en un mensaje enviado a la agencia de noticias Yonhap, que sentía responsabilidad por las circunstancias que llevaron a que una miembro de ese cuerpo armado se quitara la vida tras ser agredida por un colega.
El Ejército surcoreano ha sido objeto de intensas críticas después de que la sargento mayor se suicidara, en mayo pasado, tras haber sido acosada sexualmente por un compañero del mismo rango, unos tres meses atrás.
Pese a la denuncia de la víctima, su unidad no tomó las medidas correspondientes para protegerla ni realizó una investigación activa.
Algunos de sus oficiales superiores incluso la presionaron para llegar a un acuerdo con el sospechoso y la Fuerza Aérea no reportó completamente el caso al Ministerio de Defensa, en un aparente intento de encubrir el delito sexual y restar importancia a su muerte.
El presidente Moon Jae In, quien aceptó la renuncia de Lee, ordenó realizar una investigación exhaustiva y que se castigue severamente a los responsables.
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