El domingo, el presidente Sebastián Piñera promulgó finalmente la entrega de un Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) que beneficiará según el Gobierno a unos 15 millones de personas inscritas en el Registro Social de Hogares (RSH).
Esta medida era largamente exigida por la oposición, pues hasta ahora el Gobierno se limitó a entregar ayudas calificadas reiteradamente de insuficientes y tardías para que los hogares pudieran enfrentar la depauperación causada por la crisis económica y social agudizada por la pandemia de Covid-19.
En tanto, este viernes el mandatario promulgó un bono de ayuda para las pequeñas y medianas empresas, también largamente reclamado en los sectores más golpeados por la pandemia, y que desde las pymes es apreciado como el primer aporte importante a su favor.
Esas buenas noticias contrastaron con otras nada positivas, pues este sábado a las 5:00, hora local, toda la Región Metropolitana, donde se ubica esta capital, entró en cuarentena debido al rebrote de la pandemia.
La medida fue anunciada el jueves y según explicaron las autoridades sanitarias, su aplicación obedece al aumento de los contagios, la alta ocupación de camas en los hospitales y disminución de la asistencia de las personas a vacunarse contra la Covid-19.
Esta es la tercera ocasión en que Santiago de Chile entra completamente en el máximo confinamiento desde la aparición del coronavirus SARS-CoV-2 en el país.
La situación sanitaria resulta más que preocupante ante el aumento de nuevos contagiados y fallecidos a causa de la enfermedad, y el abarrotamiento de los hospitales, algunos de los cuales han debido ingresar enfermos graves hasta en las salas de urgencias.
Ello, cuando los especialistas alertan sobre la posibilidad de que los ingresos aumenten en las próximas semanas, con lo cual el dilema de la ultima cama amenaza al país.
La vuelta a la cuarentena en toda la capital y lo que muchos califican como un mal manejo del gobierno al enfrentamiento de la pandemia generaron una explosión de críticas desde actores tan distintos como especialistas de la salud, gremios empresariales y políticos de oposición.
Hasta los partidos de derecha cuestionaron la medida y la directiva de la conservadora Unión Demócrata Independiente (UDI) amenazó con rechazar la extensión del estado de excepción constitucional si el gobierno no revisa las medidas para controlar la pandemia.
Como evidencia de la gravedad del momento, el presidente Piñera decidió posponer una gira por países de Europa que iniciaría el 22 de junio, apenas 24 horas después de haberla anunciado oficialmente La Moneda.
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