Este año, la coproducción entre Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Francia, México y Noruega brilló como primera película latinoamericana que se exhibe en el evento europeo, adonde llevó la diversidad y fuerza del folclore a nivel regional.
La ópera prima del realizador argentino Juan Pablo Félix reivindicó el papel del arte como refugio ante un drama de conflicto familiar y de fronteras mientras presentó a la audiencia española la belleza del baile argentino conocido como malambo y otras celebraciones populares en el continente.
Asimismo, el actor chileno Alfredo Castro mereció la Biznaga de Plata a la Mejor interpretación masculina de reparto por su participación en el filme que, en 2020, mostró sus credenciales en el Festival de Cine de Toronto.
Por el país anfitrión, la película El vientre del mar, del realizador Agustí Villaronga, alcanzó seis galardones, lo que la convierte en la más premiada en la historia del certamen.
Otras cintas galardonadas de la región fueron Samichay, en busca de la felicidad (Perú), Las motitos (Argentina) y Leading ladies (Colombia), que despuntaron en la sección Zonazine por su guión, dirección e interpretación, respectivamente.
En la sección documental destacaron las coproducciones Bosco (Uruguay) y El Father como sí mismo (Venezuela), ambas realizadas de manera conjunta con países europeos como Italia y Reino Unido.
Del 3 al 13 de junio, el Festival de Málaga vivió una de sus ediciones más especiales debido a las exigencias sanitarias que impuso la Covid-19 tanto al público como los profesionales de la industria.
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