A los funcionarios los raptaron cuando participaban en una misión para deslindar territorios en la localidad de Ekondotiti, recogió el diario Journal du Cameroun tras destacar que los asaltantes demandaron el pago de unos 76 mil 200 euros por liberar a los rehenes.
Las autoridades confirmaron el suceso e indicaron estar en contacto con uno de los captores, quien explicó que a los delegados los separaron en dos grupos.
Por su parte, las familias de las víctimas criticaron al Gobierno por la falta de un dispositivo de seguridad que impida tales sucesos.
Ese secuestro ocurrió un día después de la muerte de dos policías y dos gendarmes (policía militarizada) en un ataque acreditado a facciones separatistas en la misma región, según afirmó el miércoles el gobernador de la Región Sudoeste, Okalia Bernard.
En 2016 los residentes de las dos regiones -Noroeste y Suroeste– excolonias británicas, comenzaron protestas pacíficas contra su supuesta marginación por parte del Gobierno, las autoridades enfrentaron fuertemente esas demostraciones, lo cual intensificó las contradicciones.
Esa reacción oficial desató un proceso que derivó en la autoproclamación de la independencia de Ambazonia el 1 de octubre de 2017, una república no reconocida, y la formación de destacamentos guerrilleros, los cuales aumentaron, así como el apoyo a los líderes separatistas
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